Se denomina infección sinusal a una inflamación de los senos paranasales, causada por un hongo, virus o bacteria. Los senos paranasales son espacios ubicados detrás de las mejillas, la nariz, la frente y los ojos. En senos paranasales sanos, el moco puede circular sin inconvenientes.
Cuando los senos paranasales se inflaman, el moco comienza a acumularse y se desarrollan los síntomas característicos. Junto a ellos, las bacterias y microorganismos pueden proliferar con mayor facilidad desarrollando más problemas. Los síntomas son muy variados, aunque los más comunes son:
Cefaleas.
Fatiga y malestar generalizado.
Presión detrás de los ojos y en las mejillas.
Dolor de dientes y encías.
Sensibilidad facial.
Fiebre.
Mal aliento.
Congestión nasal prolongada. Secreciones.
Pérdida del olfato.
Tos y ardor en la garganta.
El lavado nasal y cómo una niña alivió su infección sinusal.
Esta pequeña niña sufrió por varios días y tuvo grandes problemas para conciliar el sueño. Durante la noche, su infección sinusal le provocaba grandes cefaleas y le impedía dormir de manera correcta. Esto trajo grandes problemas en su vida cotidiana ya que sufría de un cansancio crónico.
Para aliviar sus síntomas y viendo que los medicamentos tardaban en hacer efecto, sus padres decidieron realizarle un lavado nasal. También conocido como Jala Net, el lavado nasal es una manera de depuración de los senos paranasales.
La técnica consiste en realizar una limpieza con agua salina y se necesita una vasija especial.
¿Cómo realizar un Jala Neti de manera correcta?
Este lavado nasal es completamente seguro y muy efectivo. Puede realizarse tanto en adultos como en niños, siempre y cuando se realice de la manera correcta.
1. Coloca agua pura en un recipiente y caliéntala hasta lograr la temperatura corporal. Esto sería aproximadamente a 36º C.
2. Una vez que alcance esa temperatura, diluye una cucharadita de sal marina. La proporción correcta es una cucharadita cada 500 ml de agua.
3. Adquiere una lota para lavado nasal. Son semejantes a una tetera, de menor tamaño y están diseñadas especialmente para este trabajo. Llénala con el líquido que acabas de elaborar.
4. Inclina tu cabeza de lado. Las fosas nasales deben quedar una sobre otra. Coloca el tubo de la lota en el orificio superior y vierte el agua por allí. Con la cabeza, acompaña el recorrido del agua, la cual deberá salir por el otro orificio, luego de limpiar los senos paranasales.
5. Repite todo el procedimiento pero ahora comienza por el orificio opuesto. Para realizar un lavado profundo, deberás realizarlo unas tres veces por orificio.
Un caso real y extremo de infección sinusal.
La niña que verás a continuación es la pequeña que pudo aliviar sus síntomas luego de un lavado nasal. Cuesta creer que en su diminuta cabeza entre tanta secreción.