Dios y Padre nuestro, que infundiste en tu sierva María de los Ángeles un gran amor a la Eucaristía y una entrega generosa al servicio del culto eucarístico.
Te pedimos este mismo amor a Jesús Sacramentado del que vivió tu fiel sierva, y por su intercesión, concédenos alcanzar la gracia que te pedimos... y hacer tu voluntad toda nuestra vida.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.