Existen varios métodos para aumentar el tamaño de los senos. Desde las cirugías hasta los masajes y suplementos naturales. Para las personas que prefieren los métodos naturales, una buena opción, además de los masajes, podría ser el probar algunos remedios herbales para aumentar el busto.
A continuación le mostramos las plantas que aumentan el busto
Fenogreco (Trigonella foenum-graecum)
Las semillas de fenogreco contienen un compuesto llamado diosgenina el cual se usa en la forma semi sintética de la hormona femenina, estrógeno.
El estrógeno ayuda al crecimiento de células del seno. El fenogreco se puede tomar en té o aplicar externamente sobre los senos. La receta para aplicarlo externamente es mezlar semillas de fenogreco en polvo con un poquito de aceite vegetal hasta formar una pasta. Luego se aplica la pasta sobre los senos.
Hinojo (Foeniculum vulgare)
El hinojo también contiene estrógeno por lo que ha sido un remedio casero común usado por muchos años para promover la producción de leche. No se debe usar durante el embarazo.
Hoy día es una planta muy recomendada como remedios natural para encoger una próstata agrandada. Sin embargo, hace muchos años se usaba para agrandar los pechos. Esta hierba se consigue en forma de cápsula en casi todas las farmacias y supermercados que tengan un pasillo de vitaminas.
Trébol rojo
Las hojas y las flores del trébol rojo contienen isoflavonas, componentes similares al estrógeno que también se encuentran en la soja y la alfalfa. En teoría, las isoflavonas del trébol rojo pueden actuar para aumentar el tamaño de los senos al producir un aumento en los niveles de estrógeno.
Sin embargo, el Centro Médico de la Universidad de Maryland informa que no hay pruebas suficientes de que el trébol rojo tenga tal efecto.
Se debe ejercer mucha precaución antes de usar cualquier planta que aumente la producción de estrógeno ya que en varios estudios se ha relacionado el estrógeno con el desarrollo del cáncer. De hecho, el Instituto Nacional de Ciencias de Salud Ambiental en Estados Unidos (National Institute of Environmental Health Sciences) ha declarado oficialmente que el estrógeno es un carcinógeno.